El Espinar
Desde el Puerto de Guadarrama la carretera enfila hacia los pinares de San Rafael, un santuario para los amantes de la bicicleta de montaña o los aficionados a los restos históricos de la Guerra Civil, que cada vez son más visitados. Enseguida se llega a El Espinar, lugar que al igual que San Rafael cobra una vida inusitada durante el verano. Se puede escapar de la tentación de la autopista para desviarse por carreteras secundarias y conducir tranquilamente en busca de lugares poco visitados. Otero de Herreros nos recuerda con su nombre los trabajos de extracción y fundición de metales que se han llevado a cabo históricamente en la zona. No hay duda de que es el Ferreros del Libro de Buen Amor. El edificio de la estación de tren, en un enclave pintoresco, ha sido utilizado en numerosas películas por su imagen tradicional. Es el momento de iniciar una pequeña ruta circular para conocer Valdeprados y Vegas de Matute. Son dos pueblos con buenos ejemplos de arquitectura tradicional en piedra. En el primero destaca la casa fuerte de los condes de Puñoenrrostro con su imponente torreón. En el segundo, varias casonas y, sobre todo, la iglesia de Santo Tomás de Canterbury, con un retablo que ha sido atribuido a Berruguete. Es recomendable un paseo por el paraje conocido como La Risca, un desfiladero no muy largo pero muy atractivo para los senderistas y los escaladores. La ruta continúa por poblaciones como Ortigosa del Monte, La Losa y Navas de Riofrío. Por aquí encontramos el palacio de Riofrío, un real sitio muy diferente al cercano y más conocido de La Granja. Una de sus características es que se encuentra dentro de un parque que protege los encinares que tanto abundaban en esta comarca hace siglos. Es una opción perfecta para ir con niños porque el lugar está habitado por una considerable cantidad de ciervos y gamos que son fácilmente visibles desde el coche cuando se circula por la carretera de acceso. Es un inmenso edificio de influencias italianas con las fachadas de peculiar color rosado, relativamente sobrias, que contrastan con el espléndido interior barroco. La doble escalera imperial es la más completa de los palacios españoles. Entre sus fondos se encuentran obras de Velázquez, Rubens y Goya. Aunque los caminos conducen claramente a Segovia hay que desviarse hacia Madrona para disfrutar de la iglesia de la Virgen de la Cerca, con su elegante galería con columnas dobles. Otro de esos tesoros que se encuentran al conducir tranquilamente por carreteras secundarias.
LA RUTA Una ruta de cine con pueblos perfecta para una rápida escapada. Nombres como El Espinar o San Rafael son la antesala de Valdeprados, Vegas de Matute, Oteros de Herreros, La Losa o Madrona. Parada obligada en el Palacio de Riofrío.
+ INFO: Un secreto: el espacio arqueológico de la Cuesta de la Alamedilla guarda una de las necrópolis visigodas más importantes de la Península.