Ruta Entre Rojos y negros.
Se trata de un templo románico reformado en el s. XVI. Tiene su entrada a través del muro sur, por un atrio con portada de estilo clasicista, de la segunda mitad del s. XVI, y de frente la portada románica de entrada a la nave, formada por dos arquivoltas con motivos vegetales de gran tosquedad. Dentro de la nave, existe un coro de madera y una pila bautismal decorada en forma de cáliz de flor.
El retablo es barroco y en el destaca una imagen de la virgen con el niño, y además hay una pequeña capilla dedicada a Cristo crucificado. En el lado norte se alza un retablo neoclásico policromado dedicado a San Antonio de Padua, y junto a esta capilla dedicada a San Antonio se abre la puerta que comunica con la sacristía. En el retablo mayor aparece una figura moderna de la virgen, y varias tablas pintadas de estilo renacentista castellano que representan el ciclo de la natividad.