Parral de Villovela

Parral de Villovela es una pequeña y tranquila localidad del municipio de Escobar de Polendos, situada en la comarca de Tierras de Segovia, a unos 25 kilómetros al noroeste de la capital provincial. Con tan solo tres habitantes censados, representa el arquetipo de los pueblos mínimos que conservan la esencia más pura del medio rural castellano.

La aldea se encuentra enclavada en el histórico Sexmo de Cabezas, una de las divisiones territoriales tradicionales de la Comunidad de Villa y Tierra de Segovia. Rodeado de campos de cultivo, pequeños arroyos y suaves colinas, Parral de Villovela es un lugar donde el tiempo parece haberse detenido, ideal para quienes buscan desconectar en un entorno de paz, historia y naturaleza.

La historia del lugar aparece documentada ya en el siglo XIX, cuando el Diccionario de Pascual Madoz menciona la población como “El Parral”, con una treintena de vecinos dedicados mayoritariamente a la agricultura de subsistencia. La adición de “de Villovela” al topónimo remite a su cercanía con Villovela de Pirón, de donde se distingue geográficamente por apenas unos kilómetros.

El paisaje que lo rodea es el de la campiña segoviana más característica: campos de cereal, páramos calizos y senderos rurales apenas transitados. En primavera, las laderas se tiñen de verde, y en verano domina el dorado de la mies, bajo cielos amplios y serenos.

Aunque pequeño, Parral de Villovela está rodeado de localidades con un notable patrimonio:

  • En Villovela de Pirón, destaca la iglesia románica de la Purificación de Nuestra Señora, con un retablo barroco del siglo XVIII.
  • En Peñarrubias de Pirón, se conserva la ermita de la Virgen de la Octava, entre sabinares y parameras.
  • El propio Escobar de Polendos, cabecera municipal, conserva un interesante templo románico: la iglesia de San Nicolás de Bari.

La zona, poco masificada, invita al senderismo y al turismo rural pausado, con rutas señalizadas que recorren la campiña entre cañadas, fuentes y restos de arquitectura tradicional.

Fiestas y tradiciones

  • San Vicente Mártir (22 de enero), patrón del pueblo, se celebra con actos religiosos y reunión vecinal.
  • San Isidro Labrador (15 de mayo), protector del campo, se celebra en comunión con otros pueblos del municipio, rememorando el vínculo agrícola del territorio.

Aunque la población es escasa, los vecinos y descendientes mantienen vivas estas tradiciones, convirtiéndolas en momentos de reencuentro y celebración compartida.

Parral de Villovela es un lugar que seduce por su silencio, su paisaje abierto y su conexión con una forma de vida que hoy resulta excepcional. Una parada breve pero significativa para quien quiera conocer la Segovia más profunda, sincera y olvidada.